Tócala otra vez Sam

Buenas tardes a tod@s:

Como las buenas series de temporada, me tome un parón navideño en esto de estaros escribiendo. Pero también como las buenas series (o los culebrones, que hay opiniones para todos los gustos) aquí estoy de nuevo.

De primeras un “lo siento” o un “perdón”. A muchos de los que estáis en esta lista de distribución de Spam no os logre ver. Pero en serio, nunca había tenido unas vacaciones tan estresantes. ¿Os sabéis esas citas rápidas en las que solo hay cinco minutos para hablar con cada pretendiente, y hay que hacer sonar una campanilla?. Pues así me sentí yo la mayor parte del tiempo. También hay que sumar el que mi Iphone muriera y me quedara sin Whatsapp (quien diría que se pudiera depender tanto de un puto programa de móvil), que me quedara sin tarjetas para sacar dinero, que no haya internet, ir al notario, carnet de conducir y como colofón final el tener que vaciar la casa. No es que tenga excusa, pero parte de mis lectores habituales (Lola, mi hermanita vasca, Raquel…..) no me vieron tanto como hubiera querido y ellos se merecen: sorry

Y es que por no tener, ya no tengo ni casa en Madrid. No había otro remedio que vaciarla (otra vez). Y la de cajas que salen de una casa que se suponía que no tenía mucho y mide 45m2. Diría que no lo vuelvo a hacer, pero la verdad es que eso ya no se lo cree nadie. En el mejor de los casos intentare no hacerlo otra vez demasiado pronto. Ahora una buena parte de mi vida y mis cosas ( y sí, muuuuuchas zapatillas) están en un sótano de La Sierra de Madrid. Lo que ha hecho 11.000 km conmigo es una cosa tan importante como mi cafetera, junto con 2 quesos, un kilo de jamón y 2 botellas de vermú. El mejor acuerdo al que ha llegado la diplomacia española a nivel internacional es con Chile para que se pueda meter jamón y queso. Como suena.

Por lo demás esta una semana corta. Yo pensé que iba a estar hecho polvo y llorando por los rincones y no, de eso nada. El como el ser humano es capaz de acostumbrase a todo, incluso lo peor, es asombroso. Parece realmente que las vacaciones no hubieran pasado. Además el volver a un sitio que ya está más o menos acomodado a uno, con bastantes de las cosas, y hasta fotos, hace que esta vez la morriña haya descendido. Eso y el no volver a mi “querido” Calama.

Con Joe literalmente ni me he visto. El día que yo llegaba el se iba para Barcelona de trabajo. Y es que por mucho que se queje sus viajes de curro son transoceánicos, y para tener que “sufrir” en un casting eligiendo modelos, tener que hacer fotos y luego tener 3 días libres en la Ciudad Condal. Una tortura vaya. Pero me temo que lo bueno también se le acaba a él y el miércoles volverá a la realidad chilena.

Me han confirmado también el tema de la tele. A finales de mes, o primera de febrero veréis como me gano a pulso que todos los chilenos me quieran correr a gorrazos. Ellos lo editaran, pero amable, lo que se dice amable…. como que no fui. Pero es que chicos, ayer, una vez más, Me vi vencido por las circunstancias. Reto al que quiera a intentar explicar a un camarero como es un café con hielo, y que lo logre. Yo no fui capaz. Tras decirle que un vaso con dos cubitos y un café corto expreso, me sirvió un cuenco con hielo picado un americano en una taza hasta arriba. Para llorar. Así que me termine tomando el café como pude en un cuenco….. ¿Veis? A eso si que todavía no logro acostúmbrame?

Besos&abrazos

P.D.: os dejo el link de publicidad del programa. http://www.cuatro.com/practica-cuatro/Que_hago_yo_aqui_2_1531455130.html